Por qué se deben certificar los bosques

La certificación de la Gestión Forestal Sostenible proporciona una serie de beneficios para todos:

  • Es la única prueba independiente de que el bosque está siendo gestionado según prácticas adaptadas social, económica y medioambientalmente a las condiciones locales.
  • Una Gestión Forestal Sostenible supone ventajas ambientales como reducción de riesgo ante incendios y plagas, contribución a la mitigación del cambio climático, conservación de la biodiversidad, y de recursos como el agua y el suelo…
  • Promueve la conservación y mejora de las masas forestales.
  • Una adecuada Gestión Forestal, proporciona beneficios económicos derivados de la mejora de la productividad y de la racionalización del proceso de explotación y aprovechamiento forestal.
  • Supone un aumento de los posibles mercados receptores de madera, puesto que las empresas e industrias forestales que también estén certificadas demandarán aquella materia prima.
  • El cumplimiento de la legislación forestal hace que la Administración mantenga una posición amigable hacia el gestor forestal. Además, los planes de gestión asociados a la certificación, suponen una reducción de posibles infracciones por parte del propietario.
  • Los montes, además de producir madera, producen pastos, resinas, corcho, leña; todos estos productos se traducen en beneficios para las personas, generación de empleo y, en definitiva, bienestar social.
  • El cuidado del entorno permite el desarrollo de las poblaciones rurales, así como nuevas formas de ocio relacionadas con el disfrute de la naturaleza.
  • Consolida y mejora la imagen positiva del bosque y de los productos forestales como una materia prima natural, ecológica y renovable.